Pues sí, para labrarse un buen futuro, es importante contar con un buen nivel de formación, y que esta sea de calidad, pero lo que muchos estudiantes sobresalientes olvidan es que, tan importante como cultivar el cerebro, es realizar deporte de forma habitual, como decía los griegos "Mens sana in corpore sano".
El deporte no solo ayuda a mejorar la salud y a sentirse mejor con uno mismo, sino que, aunque muchos no lo sepan, favorece la concentración en el estudio.
El deporte ayuda a liberar energía, estrés y tensiones, de forma que quien realiza estudio con regularidad, al sentarse a estudiar está libre del resto de problemas y pueden centrarse simplemente en estudiar.
Una persona que realiza deporte a diario está acostumbrada a rutinas de trabajo, por ello, no le es difícil tener una rutina de horas y tiempos destinados a a la formación académica.
La actividad física mejora la salud física y ayuda a mejorar la seguridad en uno mismo, ello hace que sea más sencillo confiar en las propias habilidades para superar exámenes, y lo que es más complicado, para superar exámenes y pruebas orales. Convertir el deporte en un hábito, no es necesario convertirse en un profesional de los deportes, ni practicarlo muchas horas al día, pero basta convertirlo en una rutina habitual para ver los efectos en el estudio.